Hoy Europa, está en declive.
Por la falta de confianza en sus propios valores: de esfuerzo, de austeridad, del cristianismo, de la familia tradicional, del respeto a la vida, de la autoridad de padres y maestros, de una educación exigente. Los ciudadanos son cada vez más egoístas, materialistas, hedonistas, muchos solo piensan en trabajar poco y jubilarse pronto. En España se acepta socialmente hacer todo tipo de trampas, para sacar ventajas individuales a cargo del Estado, aún a costa de mentir.
Tenemos demasiados ciudadanos acomplejados tanto por su pasado personal como por la propia historia occidental. ¡Eso sí! sobreprotegidos por los estados muchos son cada vez más holgazanes, todo ello en un entorno demoledor: de gran consumo de drogas, con alto consumo de alcohol incluso a edades tempranas, con mucha emigración ilegal, el multiculturalismo en auge, con la repulsa de los países radicales islámicos a todo lo que suene a occidental, la aparición de un nuevo tipo de indigenismo agresivo, la consolidación de la nueva dictadura china, la sobreprotección a ciertos animales en contraposición con la desprotección a los fetos humanos, con más de 4.500 expedientes anuales de agresiones de hijos a sus padres, hoy en España.