Información relevante para comprender mejor
Contexto internacional
El escenario de confrontación entre Mussolini y Hitler por un lado y Stalin por el otro, estaba servido. El choque de ideas era globalizado y se produjo tanto en Inglaterra, como en Francia, etc. La oportunidad de la primera confrontación la realizaron en España, también en Abisinia, Manchuria. La Komintern, diseñó y apoyó la formación de Frentes Populares, como sistema de acumular fuerzas, y avanzar hacia la revolución social. Fueron las tesis defendidas por Dimitrov, y presentadas como unos auténticos caballos de Troya en territorio enemigo.
El triunfo de las izquierdas en febrero del 36, confirmó los peores temores en el resto de los ciudadanos, pues a pesar de lo ajustado de la votación, crearon una dinámica de incendios de iglesias y conventos, abrieron las puertas de la cárcel de Oviedo, etc. El poder de los comunistas hasta entonces muy minoritarios aumentó de manera considerable y preocupante, con tan solo 17 diputados tenían mucho peso, el peso que les daba el apoyo incondicional de la URSS de Stalin.
Es poco conocido como llegó el terror de Stalin a España, como consecuencia y ramificación de las purgas de Moscú, aquí se persiguió, acosó y destruyó al POUM, que representaba a sus enemigos troskistas, fabricaron pruebas falsas para acusarles de complicidad con los sublevados, y consiguieron la condena de los tribunales por alta traición. Muchas de estas atrocidades pasaron desapercibidas, porque coincidieron con el Bombardeo de Guernica, que con su repercusión mediática desvió la atención sobre estos sucesos, sobre todo transcurridos en mayo del 37 en Barcelona.
Ayuda Militar recibida por el Bando Nacional
Los alemanes alcanzaron un máximo de 10.000 hombres, incluyendo los 5.000 de la Legión Cóndor, de Aviación, una unidad experimental de tanques y fueron 300 sus muertos. Suministraron instructores para el entrenamiento rápido en las academias militares de oficiales y pilotos. También suministraron 200 tanques y 600 aviones y buenos cañones antiaéreos de 88 milímetros, que neutralizaron la superioridad aérea republicana en momentos delicados de la contienda. La ayuda de las fuerzas italianas fue mucho mayor, entre 40.000 y 50.000 hombres, que sufrieron 4.000 bajas. También aportaron 150 tanques, 660 aviones, 800 piezas de artillería, alguna de estimable precisión y calidad. También contaron los nacionales con 75.000 soldados moros o marroquís, procedentes del Protectorado Español en Marruecos, los famosos Tabores.
Ayudas Militar recibida por el Bando Republicano
Los rusos suministraron a la República, 1.000 aviones, 900 tanques, 300 carros blindados, 1.550 piezas de artillería y gran cantidad de equipamiento militar de todo tipo, Los franceses contribuyeron con 300 aviones. Con respecto al material, las cantidades fueron similares las que recibieron un bando y el otro.
Los republicanos lo utilizaron con menor eficacia y gran parte se quedo sobre el campo de batalla cuando se retiraban. Los tanques rusos eran más pesados, mejor armados, eran más veloces, y en todos los aspectos superaban a los tanques alemanes e italianos, no los utilizaron convenientemente, y se les abandonaba fácilmente. Los nacionales llegaron a contar con un regimiento equipado entero de blindados rusos. Los rusos suministraron a la República 1.000 pilotos y unos 2.000 especialistas. En total combatieron también unos 40.000 Brigadistas Internacionales, aunque simultáneamente nunca más de 18.000 soldados voluntarios.
Novedades militares
Toda guerra es un lugar de experimentación y aprendizaje, la Guerra de España, no fue una excepción, los aspectos más destacados fueron:
Apoyo aéreo táctico, en la Guerra de España se incorporó este concepto, de tal manera que desde entonces no se concibió el avance de la infantería sin dicho apoyo aéreo, por mostrarse eficaz e imprescindible.
Ataque en Cadena, invención de la aviación nacional, al colocarse en vuelo en fila india los aparatos antes de hacer distintas pasadas sobre el objetivo, se ganaba en concentración de fuego y en dificultar de abatimiento de los aparatos, por los antiaéreos por hacer menor blanco, más tarde se imitó en la Segunda Guerra Mundial.
Barreras artilleras, nunca antes se habían utilizada de manera tan coordinada, con un fuego potente y concentrado que barría sistemáticamente el terreno antes de que interviniese la aviación, y como forma de preparar el asalto de la infantería.
Superioridad militar de los Nacionales
Las ayudas exteriores no desequilibraron la balanza bélica. Fue la capacidad y el criterio de los mandos y jefes militares del Bando Nacional, que aunque en menor número, gozaron de mayor consideración que sus compañeros del bando republicano, entre sus propios y se supieron organizar bien desde el comienzo. También hay que recordar que estaban más fogueados que otros muchos de sus compañeros, que eran más militares de gabinete, al haber pasado muchos de ellos por la guerra en Marruecos, siempre estuvieron bien dirigidos, y todo ello posibilitó desequilibrar a su favor la contienda. Hay que recordar que Franco fue el capitán más joven del Ejército, a los 33 años era el general más joven europeo. Se fogueó durante 20 años en las guerras de Marruecos en el Rif. Fue un militar muy organizado, dirigió la Academia Militar de Zaragoza, que era uno de los centros más modernos de la Europa de su tiempo. Él planteó una guerra en términos militares y el otro bando la planteó como si fuese una guerra política.
Situación financiera y los costes de la guerra
Los nacionales consiguieron mantener un papel moneda respetable, para la peseta nacional, aún sin poder contar con el beneficio de las reservas de oro de la nación, ni con el apoyo del Banco de España. La peseta republicana cayó en su cotización muy pronto y en el transcurso de la guerra siguió cayendo.
Los nacionales adeudaron a Alemania 225 millones de dólares, y a Italia 273 millones de dólares, que estaban lógicamente confiados en que ganasen la guerra los Nacionales, para poder cobrar todos los adelantos en materia militar, como efectivamente se fue pagando al finalizar la guerra.
La peseta republicana cayó en su cotización muy pronto y en el transcurso de la guerra siguió cayendo. Los nacionales adeudaron a Alemania 225 millones de dólares, y a Italia 273 millones de dólares, que estaban lógicamente confiados en que ganasen la guerra los Nacionales, para poder cobrar todos los adelantos en materia militar, como efectivamente se fue pagando al finalizar la guerra.
La República contaba con grandes reservas de oro, calculadas en torno a 700 toneladas, y en vez de utilizar dichas reservas como garantía para la obtención de préstamos a largo plazo, terminaron por entregar a Stalin las dos terceras partes de dichas reservas a cambio de armamento, y así posibilitaron el cobro al contado de 500 millones de dólares en oro, y otros 100 millones obtenidos por exportaciones. Los rusos no sólo cobraban al contado, sino que utilizaron el suministro para aupar en la política interna española, a su gente, al propio Partido Comunista de España.
La vida cotidiana fue cada vez más dura en la zona republicana, por la escasez y carestía de los alimentos básicos. En la zona nacional, nunca se paso hambre, y se sostuvo mejor la economía de mercado.
¡Horrible saldo final!
Todos estos sucesos debilitaron la lucha republicana. Al final las cifras son aterradoras. Se calcula que habrían muerto en acción, 90.000 soldados nacionales por 110.000 soldados republicanos. Otros 10.000 se calcula que murieron por efecto de bombardeos, y hay que sumar los 105.000 asesinados en las retaguardias (50.000 por los nacionales, y 55.000 por los republicanos), detrás de las líneas. Se calcula que fueron 500.000 los exiliados, y se estima que tan sólo la mitad volvió. Recientemente otros expertos, reducen las cifras de muertos en combate y en las retaguardias, de cualquier manera, el saldo es aterrador.