«Significados vacíos»
Artículo de JA Marina,
hoy en EL Mundo:
La política usa continuamente «ficciones» para resolver los problemas de la convivencia.
Ficciones son «la voluntad popular», «la voz del pueblo», las distintas «comunidades imaginarias» inventadas para favorecer la cohesión (desde el totemismo hasta las naciones), los sistemas de legitimación del poder, la «soberanía», que como el propio nombre indica es un concepto monárquico.
Hay una ficción especialmente interesante por su auge actual y porque sus usuarios reconocen que es una ficción (cosa llamativa).
Me refiero al «significante vacío», central en la ideología de Podemos . La idea procede del psicoanalista francés Lacan y del politólogo argentino LaClau .
Podemos aspirar a crear un discurso hegemónico, es decir movilizador, mayoritariamente seductor, que penetre en distintos niveles de la sociedad (Gramsci). Para conseguirlo se deben recoger demandas muy diferentes, unificandolas mediante un «significante vacío», mediante un líder y construyendo un enemigo. Un «significante vacío» sería «indignados» o «por el cambio» o «mayoría de progreso» o «patriotismo» o «casta».
El uso de «significantes vacíos», para buscar las equivalencias, amortiguando las diferencias, para intentar atraer todas las demandas, convierte a Podemos en un partido «mercurial».
Esta inteligente ficción está dirigida a alcanzar el poder. Pero calla acerca del modo de gobernar.