Presentación Refugiados

De un tiempo a esta parte desde prácticamente todos los sectores, de izquierdas, de extrema izquierda, de centro y de centro derecha, a todos los que no siguen los dictados de lo políticamente correcto los tildan de ultras. Tanto es así que es su propio sectarismo el que les impide analizar y comprender lo que pasa a su alrededor. Vivimos en un mundo con tecnologías avanzadas al servicio de la información pero la situación es paradójica, porque tenemos un nuevo problema: tanto por el exceso de información, como por su fácil accesibilidad, como por culpa de lo políticamente correcto, como por culpa de la moderna censura, hoy seguimos viviendo en un mundo profundamente desinformado.

Pero apenas dicen nada del Yihadismo, les interesa mucho la utilización de los refugiados musulmanes para socavar a la Europa cristiana, ellos declararon como enemigo principal de Occidente a Putin (que aparte de defender los intereses de Rusia, está contra el LGTB y por el apoyo a la tradición ortodoxa rusa) y utilizan todo el poder que pueden desde la ONU, desde la Comisión Europea para desprestigiar a todo el que se les opone. Cada vez son más las personas que se rebelan contra lo políticamente correcto.

Olvidan que somos gente normal no abducidos por pensamiento débil y venenoso de su credo. Ahora cuando no les funcionan sus mantras, en la medida en que personas de carne y hueso no se dejan moldear por estos nuevos ingenieros sociales. Ahora que se visualizan sus silenciosas conquistas. Ahora que cada vez somos más a los que no nos importan sus etiquetas, les contestaremos con sensatez y con nuestras verdades. La clave de nuestro tiempo es la batalla política cultural.

Claro que hay que ayudar a los refugiados, pero el problema es cómo les ayudamos, y en donde les ayudamos. Discutir esto es de sentido común, lo demás es posicionamiento interesado en islamizar Europa, cuestión que a muchos no nos gusta.